Culmina el proceso de descargas de sedimentos de la central hidroeléctrica Manduriacu
La Corporación Eléctrica del Ecuador informa que el día de hoy, 18 de febrero, al mediodía, culminaron los trabajos para el desalojo de sedimentación acumulada en el embalse de la central Manduriacu. De inmediato se inició el llenado del embalse con el fin de contar con el nivel de agua necesario para dar inicio al proceso de generación de energía eléctrica.
El pasado 09 de febrero comenzó la primera descarga de sedimentación. Desde ese día, CELEC EP realizó maniobras controladas de descenso de agua hasta el día de hoy, 18 de febrero. Cumpliendo los tiempos establecidos en la metodología propuesta y aprobada por la Mesa Técnica Interinstitucional, conformada por los ministerios de Energía y Recursos Naturales No Renovables, de Ambiente, la Secretaría del Agua, la Corporación Eléctrica del Ecuador (CELEC EP) y el Instituto Nacional de Biodiversidad (Inabio). Las maniobras técnicas ejecutadas en la central Manduriacu fueron presenciadas por los miembros del Comité de Operaciones Especiales instalado en la hidroeléctrica y que son parte de la Mesa Técnica Interinstitucional.
Durante estos días también se realizaron monitoreos constantes, de 12 a 14 horas diarias, en nueve puntos, que estuvieron ubicados en la cuenca de los ríos Guayllabamba, Blanco y Esmeraldas. Esta actividad fue desarrollada por especialistas de CELEC EP, Ministerio del Ambiente y de la Secretaría del Agua.
El objetivo de este operativo, en el que también participaron delegados del Municipio de Esmeraldas y de la Prefectura provincial, tuvo como objetivo garantizar la calidad del agua para ser potabilizada por las plantas que abastecen de líquido a la ciudad de Esmeraldas y sus alrededores, y conservar las especies que habitan en estos afluentes.
Desde el 15 al 17 también se reinsertaron más de 15.500 peces de diferentes especies en los afluentes naturales ubicados cerca de la central Manduriacu.
CELEC EP encargada de la operación de la central Manduriacu, ubicada entre las provincias de Pichincha e Imbabura, realiza el desalojo dos veces al año. En esta ocasión, estos trabajos han propiciado a una mejora de condiciones operativas para la generación de energía para todos los ecuatorianos y evitan el desgaste temprano de los componentes electromecánicos de las unidades de generación.